martes, 10 de julio de 2007

HIGH SCHOOL CRIOLLO

Nuevamente la falta de creatividad se hace presente en la televisión ecuatoriana, esta vez con la emisión de “Sueños de Juventud” de ECUAVISA el sábado 17 de junio.

Esta película producida íntegramente en la ciudad de Guayaquil, está inspirada… muy inspirada, en el reciente éxito mundial del largometraje “High School Musical” del imperio Dysney, que ha sumando millones de adeptos de todas las edades y países.

La historia de “Sueños de Juventud” empieza con la llegada de la chica nueva, nerd para variar, a un colegio particular, experimentando la burla de sus compañeros por ser una alumna aplicada y enamorándose del capitán del equipo de fútbol del liceo. ¿Suena conocida la historia?.

Al ser un musical televisado encontramos una serie de bailes y canciones en las que no podemos quitar que la producción puso un poco más de empeño que en el resto de la película, la cuál goza de dos o tres escenas estéticamente bien logradas, como la presentación de cheerleaders en medio del film.

Un factor muy rescatable de esta producción es el casting de actores principales, que no tienen el estereotipo que vemos comúnmente en los programas de televisión nacional, los cuáles presentan actores casi casi anglos (ojos verdes, rubios y blanquísimos), sino que se ajusta a la tipología del común de los ecuatorianos, a excepción del galán adolescente de la película e cuál no puede ser más parecido al protagonista de High School Musical.

En cuestiones de capacidad de relato y estructura propia de la historia, también encontramos falencias ya que el giro narrativo se presenta abrupto y vagamente justificado con un desenlace igualmente rápido y “tirado de los cabellos”.

La escena final donde podemos apreciar a decenas de jóvenes bailando al ritmo de la música interpretada por los protagonistas. En este punto del film encontramos una buena coordinación de extras y la ambientación que le falta al resto de la película, lastimosamente los cortes de edición no comulgan con la acción ni de los figurantes ni de los protagonistas con una destacada falta de continuidad entre plano y plano, sobretodo cuando, de un momento a otro los cantantes que estaban sobre el escenario aparecen en el otro extremo del teatro donde se presentaban.

Este esfuerzo, imagino, pudo significar importantes ingresos para la cadena ECUAVISA, si notamos la cantidad de auspiciantes que participaron en la película, a pesar de que el horario de transmisión nocturno fue del todo inapropiado para el target buscado (12-16 años), imagino a los chicos luchando por mantenerse despiertos y siendo llamados la atención por los profesores al día siguiente al quedarse dormidos encima de sus pupitres en la clase de matemática.