Ya saben la historia, una tarde de ocio, lluvia golpeando la ventana y la indiferente curiosidad de encontrar algo que valga la pena en la televisión. Me quedé en cualquier canal al azar y escuchaba sin atención la película que estaban transmitiendo. Se llamaba "Front of de class" y narraba la historia real de Brad Cohen, un maestro de primaria muy entregado a sus alumnos y con gran carisma.
La característica de este profesor estadounidense es que padecía el Síndrome de Tourette, del cuál yo había escuchado varias veces, convencido de que era un desequilibrio mental que obligaba al paciente a decir groserías y gritar de manera repentina. El tipo de la película era diferente: agradable, simpático, atractivo y con tremendas ansias de progresar en su carrera y realizar su trabajo con verdadera pasión.
Según el filme, Cohen realizaba movimientos involuntarios, su enfermedad se había manifestado desde los 6 años y continuaba hasta el momento. Una de las escenas que captaron mi atención fue cuando el maestro intenta hacer que su pequeño alumno rebelde lea un fragmento de un libro. Cohen le explica que detesta leer, por lo que el niño se asombra ya que, como se supone, los profesores dedican su vida a devorar libros. La cosa es que este maestro en especial no podía hacerlo con fluidez, porque cada vez que realizaba una actividad, esta se veía interrumpida por sus movimientos repentinos que le hacían perder la concentración.
Un dato interesante es que quienes padecen del Síndrome de Tourette, cuentan con una inteligencia normal, e incluso por encima de la media, solo que en muchas ocasiones, esta no se ve aprovechada por las fallas en el currículum educativo o el rechazo social que se manifiesta alrededor del paciente.
Este es el caso de Cohen, quien a pesar de contar con grandes recursos intelectuales, en varias ocasiones fue rechazado por personas que no comprendían su situación. Tanto así que luego de graduarse como docente en la Universidad de Branley en Peoria, Illinois, le costó mucho conseguir un empleo en una escuela primaria. La decisión de hacer lo que tanto le gustaba lo empujó a presentar su currículo en 27 planteles educativos, sin ser aceptado en ninguno de ellos. Como de costumbre, las autoridades dudaban de que una persona con su condición pueda asistir debidamente a los niños.
Luego de tanto buscar, la escuela primaria Mountain View le dio una oportunidad para estar al frente de la los segundos y terceros años. En 1997 fue galardonado con el premio Sallie Mae Primera Clase de Maestros y luego de varios triunfos escribió el libro "Al frente de la clase: ¿Cómo el síndrome de Tourette me hizo el maestro que nunca tuve? que luego se convirtió en una exitosa película para televisión.
El profesor ahora brinda apoyo a las personas que tienen Tourette en la fundación que lleva su nombre (Brad Cohen Tourette Foundation). ¿Y el amor? ah si, está casado con Nancy Lázaro, a quien conoció por medio de un servicio de citas por Internet y con quien se casó en 2006.